Homenaje a la Dra. Carmen Adalid, fallecida a los 106 años
Valencia, 2-2-2024.- El Ilustre Colegio Oficial de Médicos de Valencia (ICOMV) lamenta profundamente el fallecimiento, ayer 1 de febrero, de la doctora Carmen Adalid Ripollés a los 106 años de edad. La doctora Adalid, psiquiatra y mujer pionera y adelantada a su tiempo, desarrolló una importante carrera médica asistencial y docente. Además, participó de forma activa en la vida del ICOMV durante muchos años.
En el número 12 de la revista Valencia Médica, publicada en junio de 2018, le rendimos homenaje al cumplir un siglo de vida. Las palabras de su sobrina Isabel, autora de aquel texto, siguen vigentes hoy para describir a una médica y mujer extraordinaria.
Con su siglo de vida bien cumplido e intensamente vivido, para los que tenemos la suerte de haberla hallado y disfrutado de su amistad, la Dra. Adalid sigue siendo un prodigio de inteligencia, valentía, ecuanimidad, generosidad, infatigable al desaliento y amor inconmensurable sobre todo a la infancia desvalida.
Nacida en Valencia, sin antecedentes médicos familiares, inició su Bachillerato en el Instituto “Luis Vives” que entonces era mixto. Al sobrevenir la tragedia familiar y nacional de la guerra, tras sufrir huidas y exilios dramáticos, terminó el Bachillerato en Gerona.
De vuelta a Valencia, estudió Filosofía y Letras, sección Historia, que era en aquella época lo único “adecuado” para una mujer con aspiraciones intelectuales. Sus inquietudes iban mucho más allá, su vocación era dedicarse a la Psicología/Psiquiatría infantil que -por entonces- era una entelequia progresista, y para ejercer en esta materia había que estudiar toda la carrera de Medicina.
Esta circunstancia hizo que se licenciase en Medicina en la Universidad de Valencia, al tiempo que trabajaba como directora del Colegio Mayor Femenino “Sta. Teresa de Jesús”.
Con posterioridad, ejerció como directora en el Centro de Educación especial “Virgen de la Esperanza”, donde atendió incansable distintos problemas de discapacidad, comportamiento, aprendizaje, alienación, disfunción familiar…
Como complemento a su labor médica asistencial, también se integró en la función social del propio Colegio de Médicos, primero como vicepresidenta de la Asociación de Mujeres Médicos (a finales de los años 60 del pasado siglo cuando la sede colegial se ubicaba en la calle Isabel la Católica), y en su última etapa como fundadora del Club Deportivo Galeno (en el año 2006) y sus distintas secciones, cuya presidencia ejerció hasta recientemente.
Toda una figura progresista y luminosa en tiempos sombríos para la integración de la mujer en campos vetados.
Gracias Carmen
